diloYah
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.

Adiós muchachos, “compañeros” de mi vida…[/

Ir abajo

Adiós muchachos, “compañeros” de mi vida…[/ Empty Adiós muchachos, “compañeros” de mi vida…[/

Mensaje  carlos77 Dom 09 Ago 2009, 09:06

Interesantes reflexiones de Yoani Sánchez joven “bloguera” cubana, en cuanto al diario quehacer y costumbres de su entorno.

¿Y que paso con el “hombre nuevo y la mujer nueva”, tan cacareados conceptos del comunismo fidelismo de aquellos tiempos? Una utopía irrealizable, donde la medicina de la revolución, fue más mortal que la enfermedad de la “dictadura” de Batista?

C77



Generación Y es un Blog inspirado en gente como yo, con nombres que comienzan o contienen una "i griega". Nacidos en la Cuba de los años 70s y los 80s, marcados por las escuelas al campo, los muñequitos rusos, las salidas ilegales y la frustración. Así que invito especialmente a Yanisleidi, Yoandri, Yusimí, Yuniesky y otros que arrastran sus "i griegas" a que me lean y me escriban.

Adiós muchachos, “compañeros” de mi vida…

Adiós muchachos, “compañeros” de mi vida…[/ Vecinas

Hay palabras que tienen su momento, mientras otras logran sobrevivir a las modas para quedarse en nuestra cotidianidad. La presencia desmesurada de algunos vocablos contrasta con aquellos que han sido condenados al olvido, a ser mencionados sólo cuando se evoca el pasado. Todos esos procesos de rechazo o aproximación que ocurren dentro de nuestras cabezas se evidencian al hablar. De ahí que la muerte pública de un político empieza cuando la gente deja de crearle sobrenombres; la crisis de un ideal se demuestra si pocos hacen referencia a él y la propaganda ideológica desfallece cuando nadie repite sus maniqueos slogans. El lenguaje puede validar o enterrar cualquier utopía.

Entre las evidencias lingüísticas de nuestro actual desgano, está la paulatina desaparición del término “compañero”. Cada vez se usa menos esa fórmula para aludir a un amigo de toda la vida o alguien que encontramos por primera vez. Al ser desterrados –por sus reminiscencias pequeñoburguesas– los apelativos “señor”, “señora” y “señorita”, llegaron otros que querían mostrar una mayor familiaridad entre los cubanos, como el importado “camarada”. Se daban hasta casos tragicómicos, por ejemplo cuando una persona llamaba “compañero” al burócrata que lo hacía esperar seis horas por un papel, aunque en realidad tuviera deseos de insultarlo.

Durante años si uno se dirigía a alguien con una manera diferente al santo y seña que promulgaba el Partido, podía ser tomado por un desviado ideológico. Todos éramos “iguales” e incluso el uso del “usted” desapareció en esa falsa confianza que degeneraba en frecuentes faltas de respeto. Al abrirse la isla al turismo, una de las primeras lecciones que aprendieron los empleados de los hoteles fue a retomar el estigmatizado “señor”, para tratar a los huéspedes. Poco a poco los apelativos del pasado más reciente quedaron reducidos al vocabulario de los más fieles, de los más viejos. Así, entre los miles de saludos que se escuchan hoy en nuestras calles –brother, yunta, nagüe, socio, amigo, ecobio, puro o el simple “pssst”- cada vez aparecen menos las sonoras sílabas de “compañero”.


http://www.desdecuba.com/generaciony/
carlos77
carlos77

Cantidad de envíos : 191
Fecha de inscripción : 24/06/2009

Volver arriba Ir abajo

Volver arriba

- Temas similares

 
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.