Testimonio.

TESTIMONIO. LA AFECTADA DICE QUE LOS ENCARGADOS DEL ALBERGUE, EN COLON, SABIAN LO QUE SUCEDIA

Joven afirma que fue abusada desde los 16 años en la Ciudadela

Así consta en la declaración jurada que presentó ante el Ministerio Público. Según ella, “le contagiaron una infección sexual y la examinaban cada cierto tiempo para que no saliera embarazada”.

Tres días después de que el “hermano” Luis Fernando Ríos Valencia fuera condenado a 10 años de prisión (19 de agosto de 2008) por abuso deshonesto y corrupción de tres niños albergados en la Ciudadela Jesús y María, en Howard, una joven destapó los abusos que vivió en la Ciudadela de Colón.

Ella denunció ante el Ministerio Público que un religioso de la Fraternidad de la Divina Misericordia (FDM), que regenta la Ciudadela, le transmitió una infección sexual al abusar de ella, y que en ese lugar la controlaban para que no resultara embarazada.

En su declaración, la joven relató que una vez denunció los hechos enviaron a su victimario a una “misión” a España con la presunta ayuda de monseñor Audilio Aguilar Aguilar, obispo de la Diócesis de Colón-Kuna Yala.

Panamá América visitó, el jueves pasado, previa cita, la Catedral de Colón para conocer la versión del Obispo; sin embargo, éste comunicó telefónicamente que desconocía esa denuncia. :?:

Además, informó que no hablaría de los presuntos abusos en la Ciudadela, aún cuando la misma opera bajo su Diócesis, porque había una investigación de la Santa Sede y varios procesos judiciales en contra de miembros de la FDM, cuyo superior es el sacerdote Teófilo Rodríguez.

Testimonio.
Esta es la transcripción textual de la declaración jurada que la joven presentó ante el Ministerio Público el 22 de agosto de 2008, a las 11:26 de la mañana.

“Yo fui internada en la Ciudadela en Colón desde los 8 años. Cuando tenía más o menos 16 años, se comenzaron a dar las situaciones con el hermano Martín, pero su nombre verdadero es Edgar Squire, quien tenía en ese momento 35 años. Cada vez que me encontraba cerca del él, me comenzaba a hacer caritas y me pedía que fuera siempre a la lavandería, que es un lugar bastante solitario. Cuando estábamos allí, los dos solos, él me decía que tenía ganas de estar conmigo, o sea ganas de tener sexo.

Yo lo hacía, porque de lo contrario me echaban de allí, y como en mi casa había muchos problemas, accedía a lo que él me pedía.

En una ocasión me enfermé, me daban dolores en la parte baja del vientre y en los exámenes me salió que tenía una infección, pero era una venérea. Nunca me dijeron cuál, pero había una monja llamada María Jesús, la cual me inyectaba.

Martín fue mi primera pareja sexual. Él nunca llegó a usar preservativos y cuando se v... (eyaculaba) lo hacía fuera, pero a mí me examinaban cada cierto tiempo para que no saliera embarazada.

De esto llegó a tener conocimiento el padre Teófilo Rodríguez y el padre Ramón Buriticá, ya que son los encargados de la Ciudadela. La mayoría de los niños que entran a la Ciudadela son abusados sexualmente por los hermanos y los padres. Sé que hasta a un niño le pegaron gonorrea y en ese momento también inyectaban hasta a los hermanos. A raíz de todas las cosas que se estaban destapando, por parte de las autoridades de la Ciudadela se decidió sacar del país a Édgar y esto lo hicieron con el consentimiento de alguna persona grande de la Iglesia y ese fue el obispo Audilio Aguilar Aguilar.

En estos momentos, sé que Edgar debe estar en España, él se fue el año pasado. Yo salí de la Ciudadela el año pasado luego de que ellos me sacaron, ya que utilizaron como pretexto de que no me podían tener más allí”.

Esta joven presentó la denuncia en el Ministerio Público una vez cumplió 18 años de edad.

Posterior a esta declaración, se han presentado tres denuncias contra miembros de la Fraternidad.